tag:blogger.com,1999:blog-54810271961194213652024-03-05T01:49:06.483-08:00TRANSPARENCIASMás evidente que nunca.
Contorsiones de la voz y antojos vocales.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.comBlogger22125tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-75669018203237711232011-01-31T10:32:00.000-08:002011-02-04T10:26:36.556-08:00Masa marina<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhe8t28lSHYsRmRmXcAyA1oMLE6EG9TT7Wcq6hbVy4bKn74niAX5VPAw2XpI8WQ1jJrkLUEuL_wU_HAz-NSh1l16vwCl8tPJB34KN-BNhh55BiUiskynHk-xcYIzlvKBZ_2ygZtDtpG6MPS/s1600/marylinmonroe1.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 315px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhe8t28lSHYsRmRmXcAyA1oMLE6EG9TT7Wcq6hbVy4bKn74niAX5VPAw2XpI8WQ1jJrkLUEuL_wU_HAz-NSh1l16vwCl8tPJB34KN-BNhh55BiUiskynHk-xcYIzlvKBZ_2ygZtDtpG6MPS/s320/marylinmonroe1.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5568419819287295186" /></a><br /><br />Le prometí a D. que volvería a escribir, pero no sé cómo hacerlo si no encuentro un ritmo. No sé por qué recordé cuando le dije a alguien: "escribes como si lloraras", como si en la escritura se pudiera palpar eso que conocemos como respiración, que conocemos como un ahogo o que reconocemos como un hondo vacío sin más.<br />El otro día estuve mirando fijamente la cordillera. Me pareció ver cómo ascendía desde el otro lado una masa de agua en cámara lenta. Recordé un dibujo que quería hacer y que finalmente no lo hice. El dibujo era una cascada por la que caían cosas, cachureos, la mano parecida a un santito que PLT me regaló en México, collares, cangrejos, joyas, etc. <br />Pensé en todas esas figuras que veo cuando la mente se me queda en blanco buscando ese ritmo que quiero encontrar para escribir otra vez. Pensé en contárselo a D. pero ya no lo hice.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-36596564959472778342011-01-04T05:13:00.000-08:002011-01-04T12:45:07.290-08:00Semilluvia<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHSd5By0ZUD84IXr8xoEwf9bmKXz8nLdbU2RICPHeudFx1PR4PMjJEcXqnl3heEDCbIXh-D4dfm55TKqZZPgu8eulgAM694pjS5TZTiWQuG5AmGLXX7xzn4hcMBW_n5m-7OaKj77VMeKN5/s1600/HelmutNewton+basinger.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 316px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHSd5By0ZUD84IXr8xoEwf9bmKXz8nLdbU2RICPHeudFx1PR4PMjJEcXqnl3heEDCbIXh-D4dfm55TKqZZPgu8eulgAM694pjS5TZTiWQuG5AmGLXX7xzn4hcMBW_n5m-7OaKj77VMeKN5/s320/HelmutNewton+basinger.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5558323663426354818" /></a><br /><br />Ayer llegué a casa y había un rumor de lluvia. No prendí ni un artefacto electrónico y en cambio saqué mi diario de vida y comencé a escribir. Escribí y escribí. Partí con una reflexión sobre la amistad. Afuera el cielo estaba azul. Luego pasamos al amor, corría un viento fuertísimo. Escribí sobre alguien del que no diré su nombre. Las palabras lo embellecían todo. Las palabras hablaban de agua: en caída, detenida, congelada, en transparencia u oscuridad. Escribí y la letra salía clara, acuosa. Utilicé palabras como: cascada y cloaca.<br />Hoy por la mañana hablo con Héctor en nuestra sagrada conversación matutina por el chat. Le digo: ayer llegué a mi casa y escribí en mi diario y me di cuenta de una cosa: me enamoro de los hombres cuando escribo sobre ellos. Es decir, le explico: amor = ficción/ amor = discurso amoroso. Me encantaste, me dice él. <br />Ayer, además de escribir, releí lo último que había escrito en mi diario, supongo un ejercicio común en los que escribimos "para la constancia, para la permanencia" y decía algo como esto: aún estoy sola, en el mismo estúpido punto en el que una escritora cree que necesita a alguien para ser feliz, si todo lo que representa la felicidad está en la escritura. Por dios. Por dios. Y ni siquiera sé por qué nombro a dios, quizás es porque es un rumor latente, extraño. Igual al amor.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-71653778453336075322010-12-24T05:48:00.000-08:002010-12-29T06:22:03.219-08:00Espejo<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8GqJ6DND6t-x8GbNk014ilH6pkQXp4Nz_gEqrySohknUujyBX1ae4XyIfyroAtBmZ7ceVy-3L5JXUZQiZBSa1_bzbkcjMwptZVPw1qrKQtaNhWHG-6EM3pBpn9QryQNcGmnSqUXE8jtTG/s1600/helmut_newton_catherine_deneuve_1.png"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 214px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8GqJ6DND6t-x8GbNk014ilH6pkQXp4Nz_gEqrySohknUujyBX1ae4XyIfyroAtBmZ7ceVy-3L5JXUZQiZBSa1_bzbkcjMwptZVPw1qrKQtaNhWHG-6EM3pBpn9QryQNcGmnSqUXE8jtTG/s320/helmut_newton_catherine_deneuve_1.png" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5554251655216568162" /></a><br /><br /><br />Cuando cantaba daba vueltas el tiempo, se hacía terso, gris, complejo, acuoso, rojizo, arrebolado, prieto, estirado, pulcro bello, estruendoso, salino, campo niebla adentro, rugía la madera, acompasaba la sangre, la saliva, el oro terco de su voz. <br />Cuando cantaba la primavera y los trastos rotos de la aurora. <br />Cuando cantaba hervía la sangre, se derretía la letra, el camino de los hombres, la guerra el hambre, las estatuas contenidas duras tremendas, pura piel, puro nervio, puro deseo. <br />Cuando cantaba amanecía el mundo: se acababa la noche, comenzaba lo llano, estrepitoso, bolas de nieve, montañas de luz. <br />Cuando cantaba se cumplían años, se torcía el destino, se esperaba un derrumbe, erraban los aviones, caía la sed.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-31925499714750211802010-10-07T13:43:00.000-07:002010-10-07T19:05:47.668-07:00Movimiento<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2J8z76z2MdBgYKlX2drg-LIyglGHFQTCPZF7xyv988zXAs5mdEdV00V6IcIq8On9aDIhG8IJUOJg2cSnI-u2h_LsRsBfYiXjhe7-bcJTiTr63Jkh2VMX49fDrjJDqm_w7mrFrmI5IMk9y/s1600/11901409_gal.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 254px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2J8z76z2MdBgYKlX2drg-LIyglGHFQTCPZF7xyv988zXAs5mdEdV00V6IcIq8On9aDIhG8IJUOJg2cSnI-u2h_LsRsBfYiXjhe7-bcJTiTr63Jkh2VMX49fDrjJDqm_w7mrFrmI5IMk9y/s320/11901409_gal.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5525408944493731506" /></a><br /><br /><br />En México nunca parábamos de bailar. Se caían los árboles, empezaba el otoño, se tensionaban los textos, ardían las pocas cosas que compartíamos. Siempre nos mirábamos de frente, fruncía la boca, mordía un mechón de pelo, aclaraba la voz. Pero el baile persistía. El baile, la luz de las calles, farolas prendidas, la muerte, el polvo de los camarotes. El velo, su prisa, las pataletas de ambos; el estrépito de su paso entre los hombres, la silueta de su canto. Bullentes y averiados, clamaban las cintas, las aves, y así y así.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-12958775292594794102010-10-05T20:43:00.000-07:002010-10-06T12:30:58.334-07:00Un estado mexicano / un estado de amor<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipEeviILgWQchwmpntT97DD84h7A7azG_1icWkLypwZJ2Kpo85BjKuufQ4_JYo10MYSgqKtqOy7nLqHPFULFUyg36UekOb8MhVlFM14o5XKQl6ee14NDtXn0IVGrPxGNL56iQjIea73jwL/s1600/08+Tongolele-B.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 242px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipEeviILgWQchwmpntT97DD84h7A7azG_1icWkLypwZJ2Kpo85BjKuufQ4_JYo10MYSgqKtqOy7nLqHPFULFUyg36UekOb8MhVlFM14o5XKQl6ee14NDtXn0IVGrPxGNL56iQjIea73jwL/s320/08+Tongolele-B.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5524774394593681714" /></a><br /><br />Estoy pensando que hace un año atrás un día como hoy recibí, recién impreso, mi libro "La perla suelta". Luego Pablo Paredes pasó por mi casa a las 2 am y nos fuimos al Aeropuerto a tomar el avión hacia México. Nos llevaron mis papás en auto. La ciudad de Santiago de Chile estaba fría y las luces pasaban por la vereda, las luces, conversaciones, las luces. Tengo un recuerdo muy nítido del cruce de la Alameda con la calle General Velásquez. Así como también siento aún ese frío o mucho antes en mi casa una de las últimas conversaciones con Felipe, una botella de champán, mi mano tratando de llegar a su mano, la partida rotunda. <br />El aeropuerto estaba vacío. Al rato llegó Diego Ramírez y así fue como nos volvimos inseparables. Los poetas tenemos ese no sé qué de cabros huachos buscando amor. Nos amamos y organizamos de inmediato. Pablo fue nuestro representante. Diego la ternura. Yo ¿qué fui yo? Aún no lo sé. Nos subimos al avión. Compartimos secretos en el aire, tantos secretos. Hablamos durante horas. Las azafatas nos preguntaban si éramos estrellas de rock. Nosotros reíamos y seguíamos hablando como si nunca nos hubiésemos hablado, como si no fuéramos a hablar nunca más. <br />Cuando llegamos a México, comenzó el estado de amor. Nos esperaban ahí chicos de la comitiva, Jocelyn Pantoja nos llevó en su auto: el DF se abrió gigante. Llegamos a la casa de Héctor. Lloré cuando lo vi abrir la puerta. Nos abrazamos, me mostró su cuarto, su biblioteca y los libros, la terraza, todo era tan hermoso. Yaxkin y los chicos conversaban en el living, nadie podía creer que todo estaba recién comenzando. Parecía literatura que en un mismo lugar estuviéramos con María Eugenia López, Roxana Crisólogo, Javier Norambuena, Benjamín Morales, tantos más, tantos que llegarían, que ya se escuchaban venir. Y quedaban dos semanas. Dos semanas aún.<br />Un atardecer en ciudad de México puede cambiar el curso de los acontecimientos, lo mismo una noche, o una madrugada en la que comienza una lluvia furiosa y dos personas corren a esconderse a una ducha en una hostal, mientras el día anterior otras dos personas se miraban de reojos en el único ascensor de la misma hostal de la ducha y se despedían mordiéndose la boca en el pasillo. Un pasillo a oscuras en el que se prendía y apagaba la luz según las presencias, según pasara alguien por ahí. Nada puede seguir igual, nada. Menos con esa bullanga preciosa en cada rincón del DF: tanto era el ruido que cuando regresé a Santiago de Chile no soportaba el silencio. <br />Nada puede seguir igual después de todas esas fiestas, del arrebato de las calles del Zócalo, de Héctor diciendo: una vez aquí, te das cuenta de que puedes vivir en cualquier lugar, de Pablo L. recitando sus poemas de flores y luego posando para unas fotos con Daniel S. frente a una Iglesia, el vestido celeste de Karen Plata, la cabellera preciosa de Mara, los ojos de Alex Piperno, el perfil de Horacio, la risa de Norys, Euge preciosa recibiendo un ramo de rosas en una disco al amanecer, el silencio cálidamente majestuoso de Ben Clark, los abrazos de Benji, una dedicatoria de Kin, las conversaciones por las calles, el carrito que nos llevó a Pablo P. y Diego hacia la Condesa...<br />Imágenes, textos, tensiones, distorsiones. Aunque hubiera una sola voz que cuando hablaba o cantaba lo enmudecía todo. Incluso a las bocinas de los autos, el rumor de la próxima fiesta de la muerte. Incluso al llorar frente al Museo. Incluso cuando nos despedimos esa madrugada y me dijo: pronto nos veremos. Incluso esas palabras, su silueta en esa calle, el corte de su traje que durante los últimos días abracé tanto; incluso todo lo que vino después.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-77049121890830628522010-09-10T07:53:00.000-07:002010-09-10T07:57:37.041-07:00Decisión<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjX2RFdhvYtK8muzqsJQnQ_DIBg0PgPUl0JuLKqFJSVbKoB7DfmkEbt_WyANiiwFh0Uf9GNvY3JOH-aZ7-zvByM5X7d4XHC3ObWb1Jcu5ngbyaURt8TXyAbVUG98NtH65nefAZVg_D_Hm_2/s1600/6a00d8341c858253ef00e54f374b218833-640wi.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 315px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjX2RFdhvYtK8muzqsJQnQ_DIBg0PgPUl0JuLKqFJSVbKoB7DfmkEbt_WyANiiwFh0Uf9GNvY3JOH-aZ7-zvByM5X7d4XHC3ObWb1Jcu5ngbyaURt8TXyAbVUG98NtH65nefAZVg_D_Hm_2/s320/6a00d8341c858253ef00e54f374b218833-640wi.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5515298396992810962" /></a><br /><br /><br />Esta primavera no me voy a deprimir. Crearé un estado de amor.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-28127621469680891582010-08-22T09:09:00.000-07:002010-08-22T10:26:27.313-07:00Borrar/ botar<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjECBD5WSmacKl44fvyIlLY6X3Kl_IJm8sWXKlL0PtmJZSiMz-2YMkKbsd8Ck8o8Y8GdFagszmOr0ZOvyjgKrOYCrm-xpGqi3l05FvtooFQwPlo4coWfJJgrQjTe6u1CHBQUkp_SdXYZlPI/s1600/1f1a97d9.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 318px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjECBD5WSmacKl44fvyIlLY6X3Kl_IJm8sWXKlL0PtmJZSiMz-2YMkKbsd8Ck8o8Y8GdFagszmOr0ZOvyjgKrOYCrm-xpGqi3l05FvtooFQwPlo4coWfJJgrQjTe6u1CHBQUkp_SdXYZlPI/s320/1f1a97d9.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5508267324933276210" /></a><br /><br /><br />Participo del crepúsculo desde mi auto. Es viernes. Es más tarde que de costumbre y aún no ha oscurecido. Recuerdo los atardeceres desde mi pieza en la vieja casa en La Florida, me parece palpar la austeridad de mi dormitorio, el escritorio limpio frente a la ventana, el alumbrado eléctrico bajo, típico de las villas emplazadas en los años setenta, lejos del centro de la ciudad. Mi escritorio, los cuadernos escritos con lápiz grafito, la letra redonda y limpia. Mi escritorio, un libro de Huidobro, mis supuestas novelas en cuadernos distintos. Mi escritorio, las lecturas de mis textos, la goma de borrar. Corregía todo el tiempo. Corregía en el papel. Años más tarde todo eso desapareció en la basura cuando <em>m</em> leyó mi diario de vida y se vio y me vio y nos vio en la página manuscrita que funcionó como espejo. Una noche de verano terminaron en la basura papeles, diarios, cuadernos, libros de poemas. Todo lo que había escrito en mi vida desapareció. Desde esa vez acostumbro a botar. A borrar. A corregir. A quemar. <br /><br />El clima cambia lentamente, pasan los días, pasa todo encima mío. Miro por la ventana, hay sol, hay edificios, más atrás está la Cordillera de los Andes. Participo del crepúsculo cada vez que puedo. Esta semana he botado cosas. He guardado, he borrado, he dejado para más tarde. Después de mucho tiempo me siento libre, aunque no sé si me guste esta libertad. Repaso situaciones, conversaciones, episodios: me parece estar viendo una película que no tiene fin. Me parece que esa película me gustó tanto en un tiempo y ahora me resulta ajena. Me confunde. Como si hubiera perdido el hilo o como si no tuvieran relación los hechos que se suceden una y otra vez.<br /><br />Limpio borro boto, paso de largo sin detenerme. Debe ser la sepia que he vuelto a tomar por las noches, esa tinta de pulpo que me despeja la vista, que me hace ver con determinación. Debe ser la sepia, que aclara lo brumoso y desarticula los obstáculos, que nunca existieron, lo que pasaba era que no veía en lo absoluto.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-88379739489674360792010-08-12T07:08:00.000-07:002010-10-07T13:41:30.660-07:00Bandadas<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR7NAyhiE7wq8AIYkVxninmp17VWAx-XGbUisyQ8nklUYJuWi1LHjMFKVJHNCUggD6hAMUqKDhRw5KklaC0XEvNJpSgyVwkvLKPlyfMrLjL2VPKcS4YE7chex6Nx-gVf0mMPPIGTQQuFB4/s1600/2527405007_223dc8495a.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 210px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR7NAyhiE7wq8AIYkVxninmp17VWAx-XGbUisyQ8nklUYJuWi1LHjMFKVJHNCUggD6hAMUqKDhRw5KklaC0XEvNJpSgyVwkvLKPlyfMrLjL2VPKcS4YE7chex6Nx-gVf0mMPPIGTQQuFB4/s320/2527405007_223dc8495a.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5504525181089497618" /></a><br /><br /><br />Por la mañana, mientras manejaba mi auto por la Alameda, se cruzó en mi camino una bandada de palomas. Un día de mayo hace ya tres años atrás, estábamos con Daniel S. y Patricio en la Plaza de Armas y pasó lo mismo, pusimos los ojos en el cielo y volaban en círculos, volaban y volaban. Creo que Daniel S. se puso a dar vueltas con los brazos abiertos; seguramente con Patricio hicimos lo mismo. Y las palomas iban por el cielo o frente a los ojos: se perdía la objetividad de la distancia. <br />Esas palomas me recordaron a Pablo L. Con él paseamos mucho por Madrid. Un día vimos golondrinas y hacían lo mismo que las palomas, las miré con detención. Estábamos en el centro ¿cómo se llamaba ese lugar? Era una plaza encajonada, llena de gente. Pablo L. miraba hacia el cielo, mostrándome las golondrinas. Yo le miraba su perfil adorable y la punta de su nariz y de pasada sus ojos, que parecían absorberlo todo. <br />Daniel R. me enseña una palabra que no tiene traducción y que no escribiré acá. Le regalo mi último libro, el de las cartas. Doy vueltas en círculos. Después de todo, no soy más que literatura. O golondrinas. O palomas. La cosa es que me pierdo en el aire, voluble, ajena. Me pierdo y persisto, vuelvo, equivoco, repito.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-29984178316085234392010-08-08T08:06:00.000-07:002010-10-07T13:42:46.115-07:00Domingos<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlLKgNGnKqTNu-yLrDiJZHsaeGB2NlkPTHlRDPps_lzDUOUDMfAEKS_7ebkTyqGRbczJpCRbpyI3L282LRGCoeXtYgMGg1gjWeGFekY0sLb-i21xTfFwk4Adj3u2c6HnHUgDpk0wAs2mzD/s1600/Mapplethorpe-1388-tulip.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 319px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlLKgNGnKqTNu-yLrDiJZHsaeGB2NlkPTHlRDPps_lzDUOUDMfAEKS_7ebkTyqGRbczJpCRbpyI3L282LRGCoeXtYgMGg1gjWeGFekY0sLb-i21xTfFwk4Adj3u2c6HnHUgDpk0wAs2mzD/s320/Mapplethorpe-1388-tulip.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5503056025403291538" /></a><br /><br /><br />Cualquier mañana de domingo, en rigor, puede ser la misma. Santiago de Chile, Avda. Providencia, 10 am en punto, acabo de regresar de Valparaíso y espero la micro para ir a casa. Sol y frío. Suenan las campanas de una Iglesia que no conozco. Esas campanas y algo en la luminosidad del día, me llevan al domingo que llegué a Madrid. Cuando salimos del metro y aparecimos en una calle, Claudia A. y yo, las maletas; recuerdo lo que sentí cuando respiré ese aire, cuando palpé el rumor del verano que nacía, pleno sol a tres días de mi cumpleaños. <br />Otro domingo, meses atrás, sol de otoño en Ciudad de México, Pablo L., Sergio R. y yo, otro día domingo en una Iglesia instalada en las calles cercanas al Zócalo. Entramos. Pablo L. caminaba y miraba a los santos, yo estaba quieta frente a un Jesús de piel muy oscura con un faldón precioso. Recuerdo cómo nuestras miradas se medían de un lado a otro en esa Iglesia; recuerdo ese silencio, el silencio y la lucha entre ambos. Vuelvo a Madrid. Entramos con Pablo L. un día domingo a una Iglesia ¿Fue antes o después de pasar por la Calle del Codo? ¿Fue antes o después de ese domingo en que viajé de Barcelona a Madrid durante el día? Pablo L. me esperó en una estación de metro, no recuerdo en este momento su nombre. Pablo L. me esperó con un libro lleno de flores azules bajo el brazo; yo había escrito durante el camino un cuaderno con hojas negras que después le regalaría. Yo me quedé con el libro, él con el cuaderno: simuladores para hacernos creer que tan lejos no estamos el uno del otro.<br />Este domingo cae tierra sobre mí. Tierra cruda. Anoche en un bar se lo escuché decir a Tomás mientras me explicaba en qué trabajaba. Tomás, un chico de rulos rubios y ojos claros con el que bailé y bebí whisky de su vaso: tierra cruda. Su única y magnífica aparición esa noche para decir algo como esto: tierra cruda. Bailamos un bolero, algo de David Bowie. Tierra cruda. Antes de eso había leído en ese mismo bar, fragmentos de mi perla suelta acompañada por el piano que tocó Sebastián, el novio de Isabel. Una noche preciosa en el cerro Artillería. Al amanecer estábamos con Héctor en el terminal de buses, esperando por el nuestro, muertos de frío y dormitando en unas bancas. Llegamos a Santiago lamentándonos sarcásticamente de otro fracaso y de otra noche más. Otra. <br />Héctor parte de nuevo hacia México. Tierra cruda. Cae tierra sobre mí. Cae el sol. Pero eso mismo es tierra cruda. La separo, la disecciono, eso es. Tierra cruda, más conocida por adobe, decía Tomás. <br />Este domingo, tantos otros, los coloco en un hilo delgado para mí. O en una tela que doblo, bordo y observo; todos amparos, todos recuerdos, los sabores de un recuento de tonos, tonterías, amor.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-69051534981408326532010-05-11T12:26:00.000-07:002010-08-13T13:51:49.661-07:00Fui<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUqvuMeT5iSsbw_aJRPSqKiGhyKxQ_DTADoifFY0Y1NqCh3neQB39Erp62k8MpjpldJZTHPex007D0rHHUm4Pi3PkZYDvbT-SeR6Vr7h2f2Bkz_bvC_4tD4no38pEcWv1LFXpwWM-LdsDv/s1600/marylin31.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 251px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUqvuMeT5iSsbw_aJRPSqKiGhyKxQ_DTADoifFY0Y1NqCh3neQB39Erp62k8MpjpldJZTHPex007D0rHHUm4Pi3PkZYDvbT-SeR6Vr7h2f2Bkz_bvC_4tD4no38pEcWv1LFXpwWM-LdsDv/s320/marylin31.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5470096629206735218" /></a><br /><br />Se suponía que iba a ser al revés, pero yo iré entonces.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-57793031911371911982010-05-10T22:29:00.000-07:002010-05-10T22:36:19.151-07:00Pequeña muerte<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2QyAy5yXerZLfJTV42vzkAO9fSIojD8TqgLSqpICbaYv8AGntl9W1N048cPsdgMqIFX6r1cx9aPA1LOqa3dtijjdAQPc0hZa-CzwmmsQYu4-SZ7rNpPiWyQyGhIf_redIcrH5bj2CMFQg/s1600/romy-schneider-boccaccio-70.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 300px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2QyAy5yXerZLfJTV42vzkAO9fSIojD8TqgLSqpICbaYv8AGntl9W1N048cPsdgMqIFX6r1cx9aPA1LOqa3dtijjdAQPc0hZa-CzwmmsQYu4-SZ7rNpPiWyQyGhIf_redIcrH5bj2CMFQg/s320/romy-schneider-boccaccio-70.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5469880698627313634" /></a><br /><br />Dije no y la que parecía esconderse salió con más fuerza que nunca. <br />Hace un par de semanas preparo un viaje. <br />Duermo a destiempos. Fumo por las noches y se llena de humo mi casa.<br />Tengo unas botas celestes. Hoy me compré dos sombreros para el invierno. Sin embargo, tendré mi próximo cumpleaños de primaveras. <br />Hoy pensé: quiero escribir. Pero el día pasó largo hasta ahora. <br />Sigo pensando, quiero escribir. Como si fuera una música. Como si entrara el aire por las ventanas que no se cierran, por mucho frío que haga, por donde quiera puede pasar.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-36066431691567201152010-04-18T18:29:00.000-07:002010-04-18T18:35:26.283-07:00Tormenta<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeZ7RGS0Ke3Se4aFT3Uy5hlzH458V9vl4aYs_CnoAjQI0O548iPbaLPom1alUQNg4PtbwOW-JCeU91jDwGXdxZh96rjPM3UnWM9SCSi5jilVZMeSc5Qt_saRLyrkrbWaxhmmaWXaG8E0e-/s1600/Annette+Hanshaw.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 210px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeZ7RGS0Ke3Se4aFT3Uy5hlzH458V9vl4aYs_CnoAjQI0O548iPbaLPom1alUQNg4PtbwOW-JCeU91jDwGXdxZh96rjPM3UnWM9SCSi5jilVZMeSc5Qt_saRLyrkrbWaxhmmaWXaG8E0e-/s320/Annette+Hanshaw.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5461654846863669714" /></a><br /><br />Las estaciones intermedias se parecen a mí. A mí, que no me parezco a nadie.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-14419568720418953502010-04-01T18:07:00.000-07:002010-04-01T18:15:34.006-07:00Mariposa<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKZiNIlpdkUP-26zIN7kiWAPQYJXADOfIW9pbKKCsHScf0wF7mSXNT8IAvrlciDfZP25ekEpjLJzBQbhfiYAOd-6oV7_mf6RiQ3ehmI9kljauZXoDVOBGRRc_c3QUN5Pz-V8Mm7F-MYmnx/s1600/Marilyn-Monroe-pb03.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 256px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKZiNIlpdkUP-26zIN7kiWAPQYJXADOfIW9pbKKCsHScf0wF7mSXNT8IAvrlciDfZP25ekEpjLJzBQbhfiYAOd-6oV7_mf6RiQ3ehmI9kljauZXoDVOBGRRc_c3QUN5Pz-V8Mm7F-MYmnx/s320/Marilyn-Monroe-pb03.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5455340978542797634" /></a><br /><br />Hoy por la mañana escuché "Plantas de marzo" y pensé: qué rápido pasó todo. Pensé en el tiempo, en las cosas que decía, recordé cuando cantaba y se derretía la letra, el océano, lo salino y el campo. El campo con agua. La frescura, las notas de la tarde. El sol.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-20239507656913427922010-03-29T07:47:00.000-07:002010-03-31T12:48:16.756-07:00Caen<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXI0EVvpxDqVHCeTnmTqzZPiNUoL_CGZkh8pL2WMW6BKVQH26F4YAK4Fr8bTN6OuqmeNRDbEbHPLoWQTSh2K4UVvwdpAtpAt27k4Vt8zhTQ-sQfSkfcoH4Zk0s9yMwG4HIJq097FsVnfHF/s1600/nancy-sinatra.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 282px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXI0EVvpxDqVHCeTnmTqzZPiNUoL_CGZkh8pL2WMW6BKVQH26F4YAK4Fr8bTN6OuqmeNRDbEbHPLoWQTSh2K4UVvwdpAtpAt27k4Vt8zhTQ-sQfSkfcoH4Zk0s9yMwG4HIJq097FsVnfHF/s320/nancy-sinatra.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5454067462524857026" /></a><br /><br />Se transfigura la belleza. Caen cascadas. De agua y de brotes, centelleos estelares. Caen cascadas. Rojo en carnes santas. Acero, fiebre, escombros. Caen.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-12012379615465230202010-03-21T18:32:00.000-07:002010-03-21T19:58:00.550-07:00Verano<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFdTNd64YS2ZiLBw5t_wxGaumqVvBLwV5YZgeawcv1B3uNUKij-QiiGocLkrnmF7wAJyJm4yH0Qtug0-dGAtETXIvRvbZaD0GXJgM0JLBsvRUNIGFXscYsmSs0GCY97Fqk7P10a6z7kmyl/s1600-h/Waterfall-IV-Herb-Ritts-380651.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 261px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFdTNd64YS2ZiLBw5t_wxGaumqVvBLwV5YZgeawcv1B3uNUKij-QiiGocLkrnmF7wAJyJm4yH0Qtug0-dGAtETXIvRvbZaD0GXJgM0JLBsvRUNIGFXscYsmSs0GCY97Fqk7P10a6z7kmyl/s320/Waterfall-IV-Herb-Ritts-380651.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5451274068324881506" /></a><br /><br />En los meses pasados, cuando todo caía, solían pasar cosas. La comunicación era un hecho distinto, el sol opacaba los espacios, hacía ver de otra manera los contornos, las luces de la noche incluso. Dormía con la ventana abierta, recordaba el frío por referencias desde el otro hemisferio, suplía las carencias con el aturdimiento de los días de calor. <br /><br />El tiempo es un enigma en cuanto a sus decibeles y maneras de manifestarse, pero se dice que hoy llega el otoño. Ayer estuve en San Antonio, como lo hacía en el verano, y caminé por el puerto estremecida con las trizaduras que dejó el terremoto en el paseo que da hacia el mar. Quizás los peces se murieron, ya que todo hedía violentamente. Casi no había gente, los artesanos habían cerrado los puestos de la feria. Sin embargo por allí paseábamos con mi hermano y mis primos, mi pequeña prima Amanda me tomaba de la mano y conversábamos entre el viento y las personas que pasaban hablando de tsunamis y maremotos. <br /><br />Más tarde, hice lo que había que hacer: después de una siesta hasta casi las ocho de la noche en la casa de la parcela de mi padre, caminé antes de que anocheciera hacia la piscina. Hacía mucho frío. Dudé por un minuto de acercarme, pero lo hice. Estaba todo gris y había bruma en el horizonte. Se me heló el corazón. El verano terminó entonces, pensé, dejando con su recuerdo todo lo que allí pasó. Es increíble como los lugares se pueblan con la memoria, como van quedando por ahí palabras, historias, secretos, murmullos, risas, nostalgia.<br /><br />Mi hermana se casó en la clásica ceremonia civil el día viernes. Estaba muy feliz por ella, se veía tan hermosa con un vestido rojo y un chaleco con motitas brillantes que mi madre le tejió para ese día. Mi prima Catalina, que es como nuestra hermana menor, lloró en el acto y el llanto se reactivaba cada vez que alguien le hacía cariño. Ella me dijo: se acabó mi niñez. Yo pensé: soy la única hija que queda, pues una ya partió a formar familia. Recordé entonces algo que escribí cuando viajé de vuelta de La Serena a Santiago en febrero, cuando mi hermana me pidió que le escribiera un texto para las invitaciones de su matrimonio: ¿qué sé yo del amor? Han pasado tantos años, pero, de verdad ¿qué sé yo del amor? <br /><br />Cuando llegué a mi casa anoche, había hojas de árbol en el pasillo frente a mi puerta ¿habrá corrido viento también acá? ¿Habrá movido esas hojas desde la calle hasta mi casa? Me pregunté, en el más absoluto silencio.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-27776256287820596612010-03-18T13:29:00.000-07:002010-03-18T13:38:31.946-07:00Tacto<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2OqkqFvVsrr69xLdvHQST6DY6kX2f3kIep9lnxFI805NxV0thUIUk-FaupkyFCIobrOIf3N3X8LBJ7GGK8V7wXgO4kYw3JfLpAIGt_LgWd13GACsH6dqRW5gyRP2B2TR4z4zxsFqsl51C/s1600-h/Glenn+Gould+gould05.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2OqkqFvVsrr69xLdvHQST6DY6kX2f3kIep9lnxFI805NxV0thUIUk-FaupkyFCIobrOIf3N3X8LBJ7GGK8V7wXgO4kYw3JfLpAIGt_LgWd13GACsH6dqRW5gyRP2B2TR4z4zxsFqsl51C/s320/Glenn+Gould+gould05.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5450074774747431810" /></a><br /><br /><br />A través de toneladas de mar, a pesar de estar bajo el mar, de ir volando entre los bichos, esquivando las canciones de las sirenas, no se puede tocar. Aunque coloque el mejor ángulo, elija el mejor papel, tonalidades, escarcha, tormentos en signos, nada. Pareciera que sí, pero no se puede, ni un poco.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-55386048215902048602010-01-29T10:44:00.000-08:002010-01-29T10:53:26.172-08:00País<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjH_v48UvgS_poHsX9kelGZWEoC4wZPVuuU2QRRDCNYjJWpnKidosv-pLf4RwdIfIkvApPf1c3NsPgsdlEn4lnWX5H_8uMlOvgSHf-4Cc2Qa4WWPB9K8PF_lJpJapDRIC4r92w520bXMBQO/s1600-h/marylin_monroe2_431x276%5B1%5D.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 205px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjH_v48UvgS_poHsX9kelGZWEoC4wZPVuuU2QRRDCNYjJWpnKidosv-pLf4RwdIfIkvApPf1c3NsPgsdlEn4lnWX5H_8uMlOvgSHf-4Cc2Qa4WWPB9K8PF_lJpJapDRIC4r92w520bXMBQO/s320/marylin_monroe2_431x276%5B1%5D.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5432236176353594866" /></a><br /><br /><br />Nunca, nunca en mi vida había pronunciado, pensado, saboreado, soñado tantas veces la palabra Chile. Ni la había asimilado a un estado, a una forma de comprensión. Ni había palpado el continente, la luz, las selvas, mares y ríos, el agua que va y viene entre ambos. Eso y más, aquí espera Chile.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-46862174107368218252010-01-19T11:54:00.000-08:002010-01-19T12:00:16.151-08:00Llueva<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3sqMPipsVgjqy5Rvu7V2IDMf_jlFr4_7ASchsf_-a3NM0fbwb509yS_0N196Z6_r-L90UYVwof1h-KLI7YLRRw1irylr0LMLw1hlYJhFJN5YzfwScHYm_771Sg5j3gC3V71yJ5niTR5u6/s1600-h/mapplethorpe_calla.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 318px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3sqMPipsVgjqy5Rvu7V2IDMf_jlFr4_7ASchsf_-a3NM0fbwb509yS_0N196Z6_r-L90UYVwof1h-KLI7YLRRw1irylr0LMLw1hlYJhFJN5YzfwScHYm_771Sg5j3gC3V71yJ5niTR5u6/s320/mapplethorpe_calla.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5428541960356953666" /></a><br /><br />Siguen pasando cosas. Como si pudieran si quiera ser nombradas. La belleza a la que comienzo a habituarme es violenta y abruma por todos los rincones, por todos los ritmos, provocando quiebres, tersuras, ahogos. No alcanzo a contemplarla. La llevo dentro mío, me conmueve. Me llena de cerros, de ríos, de torres cayendo sin estrépito por un magma contínuo, por la voz, por la lengua que ahora hablo.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-16356347386820362872010-01-13T18:06:00.000-08:002010-01-16T10:10:37.406-08:00Silencio<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqoS-MtoxHIUadWVCBvvjVROfRZcqdYoUajUDuY5CMR61rs_XGzFZPE1fGBSlTGdJGWWj-0zlCxkXmlXhBsFe_fRKzNaQyWSaZfuAFZJ8RF0FGCjFRRcRAKWLgzu2isqdFOFp0rZW4jY2v/s1600-h/75570d6a.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 315px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqoS-MtoxHIUadWVCBvvjVROfRZcqdYoUajUDuY5CMR61rs_XGzFZPE1fGBSlTGdJGWWj-0zlCxkXmlXhBsFe_fRKzNaQyWSaZfuAFZJ8RF0FGCjFRRcRAKWLgzu2isqdFOFp0rZW4jY2v/s320/75570d6a.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5426411378977313778" /></a><br /><br /><br />Han pasado muchas cosas. Extrañamente, no sé escribir hoy.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-19917416717168093252010-01-03T17:35:00.000-08:002010-01-04T05:40:02.800-08:00El limbo<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6dZ3_NyLSr_1vSqwAeFohourPNpIqcgMTWwmz2UDjHVhjcno2atu9FUlF0OYp76O7PgkspYkpN_wZpnRC506BgZe-tlm5szW5yik-LEGONWkGhYP_zp0IO8sh8zlZElhK-mA5Z_gqLeh_/s1600-h/6d0978f9.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 318px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6dZ3_NyLSr_1vSqwAeFohourPNpIqcgMTWwmz2UDjHVhjcno2atu9FUlF0OYp76O7PgkspYkpN_wZpnRC506BgZe-tlm5szW5yik-LEGONWkGhYP_zp0IO8sh8zlZElhK-mA5Z_gqLeh_/s320/6d0978f9.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5422699417065777970" /></a><br /><br />El último día del año, tengo un sueño: río mucho. Río tanto que me ahogo. Despierto con risa aún, pero me resulta macabro. Tengo tres conversaciones importantes durante el día. No como. Tomo té y por comer algo sólido, unas galletas. Lloro. Duermo. Me aturdo de tanto pensar. No veo televisión, ni escucho radio. Hay mucho silencio. Apago el computador, me desconecto. Pienso mucho, pienso en países, en partidas, en viajes, en quedarse y cambiar; todo es movimiento. <br /><br />Viajo al campo con Jona, Héctor, Manuel y Yaxkin. Escuchamos música en el auto, arrancamos del calor de Santiago. En la parcela de mi padre hay sol, pero es más fresco. Nos tendemos al lado de la piscina. Caminamos hacia la laguna, reímos mucho. Vemos libélulas, bichos de todo tipo. Hay patos. Me gusta este comienzo de año. Nos siguen unos perros. Por la noche, conversamos y bebemos vino, todo muy tranquilo. En un momento, Héctor me regala su libro. A pesar de que lo he visto ya, me emociono mucho. Hay luna llena, gigante, enorme. Miro la dedicatoria, me transporto a todas las dedicatorias de todos sus libros que he leído y que él me ha regalado. Su letra, lo que dice, lo que ha dicho. Pienso: tanta literatura, tanta vida y eso que recién llevamos diez años...<br /><br />El puerto de San Antonio está bravo. Vamos de paseo, han instalado un gran mall, es horrible, pues tapa el puerto y lo encierra. Sin embargo aún me gusta, es marginal, huele a mariscos, hay lobos de mar casi al alcance de la mano; es ridículo que haya un mall tan cerca. Nos metemos por callejones hacia el muelle, vemos gatos royendo sobras de pescados, gatos gordos y toscos. El cielo está rojo, no hablamos casi. Río mucho con Héctor, me gusta estar con él. Pienso: Héctor siempre se mueve ¿nunca parará? Quizás sea hora de comenzar a imitar al hermano mayor. <br /><br />Regresamos a Santiago al mediodía. Por la tarde vamos a la Biblioteca de Santiago con Héctor, Yaxkin y Manuel. Ya no hablamos, es lindo ese silencio. Saco tres libros. Una vez en casa, comienzo a leer "Rojo y Negro" de Stendhal; me lo recomienda mi querido Pablo y lo hago para estar más cerca suyo. Pienso: Hace bien regresar a los clásicos. Descubro un nuevo rincón en mi hogar, donde llega una luz perfecta para leer. Decido reacomodar todo, que no quede ni un lugar como antes. <br /><br />Estos primeros días del año recibo música: Marais, nunca lo había escuchado, es hermoso. Recibo un cuadro de James Ensor, que nunca había visto. Recibo su voz y su imagen preciosa. Recibo invierno en este verano devastador. Recuerdo el inicio de un poema escrito para mí en un bar en México: "Nievas, se retiran, los animales...". Pienso: qué bello es recibir. Y dar mientras se recibe.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-26400062968920022602009-12-30T22:14:00.000-08:002009-12-30T23:16:06.999-08:00Así es<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgwyB3VWNhLw_dhyphenhyphenFePSWymqw_x8VYUMsQU3KKZCOepgSx-KCJgvUQFFY4cSLUvxWcnPLIdypQwDNsLV4wjVlkch3hmOkfDmLC4xRQILI-b4q6fGJPgGku0J91FtFIIrKN1hb0KEiK1E0Pq/s1600-h/2418446682_f35c71a807.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 243px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgwyB3VWNhLw_dhyphenhyphenFePSWymqw_x8VYUMsQU3KKZCOepgSx-KCJgvUQFFY4cSLUvxWcnPLIdypQwDNsLV4wjVlkch3hmOkfDmLC4xRQILI-b4q6fGJPgGku0J91FtFIIrKN1hb0KEiK1E0Pq/s320/2418446682_f35c71a807.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5421285541438143682" /></a><br /><br />Hoy dormí hasta tarde, me desperté con el televisor, como todas las mañanas. Bajé el volumen, seguí durmiendo. La casa está oscura; no sé si hace frío o calor afuera. Es verano, debe hacer calor. Pero no lo sé hasta que salgo. <br /><br />Manejo mi auto por Santiago esta tarde, la gente está alterada, hay tacos, es el penúltimo día del año. Es una tremenda estupidez. Debo llegar a casa, está todo desordenado, pienso: no te has hecho cargo de nada. <br /><br />Voy al lanzamiento del libro del taller de Diego, están Héctor y los chicos. Lee Pablo de su hijo down. En penumbras, recuerdo todas las veces que hemos estado ahí, en otras lecturas, en otros encuentros. Han pasado muchos años entre medio... ¿hasta cuándo seguiremos ahí? Nos tomamos fotos, como siempre. Miro los retratos de escritores colgados en la pared. En algún momento seremos esos retratos. Pienso: en algún momento, y ya. Estaremos en hileras y colgados. <br /><br />Miro el trabajo de Diego y su taller, es el taller que más resistencia ha formado, él que más ha permanecido. Recuerdo cuando los visité a fines de Septiembre en su Carnicería Punk. Con Diego dispusimos hacerlo antes de nuestro viaje a México. Fui vestida de color azul. Leí mis textos. Conté algunos secretos, me encanta hacer eso. Secretos míos, claro. Pienso: me fascina hablar de mis textos. Es como si evidenciara eso que no se puede hablar, lo que no se puede decir. De hecho cuando se dice ya no es más como en el momento en que ocurrió. Vimos los videos que guardo de mis performances. Fue todo tan bello. Ese día tenía puesto un anillo que no volví a usar jamás. Ese día estaba en el limbo de la tristeza, pero sonreía, pero me creía feliz. Pienso: me sentía con esperanzas. Corrijo: estaba empecinada en la esperanza. También estaba profundamente emocionada. La carnicería, con sus azulejos repletos de collages y dibujos, los frascos de Diego - vestigios de Autores de Noche - la mesa sobre la que trabajan en sus escritos, esa cordialidad, ese cariño, la perseverancia. Aplaudo a Diego. Aplaudo a Moda y Pueblo. <br /><br />¿Podremos vivir de esto? ¿Por qué sigo/ seguimos escribiendo? La literatura nos ha costado la vida, me dijo Alma Karla una noche de fiesta en la casa de Héctor en el DF. La literatura ha espantado a los débiles, pienso, que han ido cayendo como muertos, que han ido desapareciendo en el camino. Esa noche enumeramos todos los desastres: los de ella y los míos. Concluimos que no se puede hacer nada más, no se puede vivir sin escribir, no se puede seguir viviendo si se acaba. Es el motor que lo transforma todo. Es la vida misma. Qué horrible como lo explico. Intento buscar las palabras, pero no están. Pienso: aquí queda la evidencia de ello. De eso que no se puede decir. <br /><br />Es tarde, noche de insomnio. Escucho música, leo correos. Leo y leo, como si buscara algo. Pienso: no busques, está ahí. Me atoré fumando tabaco y me quemé un dedo o quizás fue la boca. Los pájaros pían, me da un poco de susto que lo hagan por la madrugada. Es hora de dormir.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5481027196119421365.post-32314078878102765572009-12-29T05:34:00.000-08:002009-12-29T06:28:22.440-08:00Acaso<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjW8QqifgcBql-XAI8x00ZEnstc9GjcqjOXSO7KNvuYaWj53mxbRkUwVt4ZuMKAvOhF3lSyAvaxMmWeJKFMt-x21dE5qU9YbgtDiyp10AIDS94N4w2SB_nngKSzkyXMM63Tcg2Lat3dGk49/s1600-h/MAP_CallaLily_86_4Press.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjW8QqifgcBql-XAI8x00ZEnstc9GjcqjOXSO7KNvuYaWj53mxbRkUwVt4ZuMKAvOhF3lSyAvaxMmWeJKFMt-x21dE5qU9YbgtDiyp10AIDS94N4w2SB_nngKSzkyXMM63Tcg2Lat3dGk49/s320/MAP_CallaLily_86_4Press.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5420653434581113506" /></a><br /><br />Mi hermana se casa. Pienso: regresé de un largo viaje. Se publicó mi tercer libro. Pienso: tengo treinta años. Hoy mi querido Héctor recibe su premio y estaré ahí con él. Pienso: una calle, los dos en Ciudad de México, sol en el cielo, yo le digo, creo que regresaré a Chile llorando, él me dice: ¿por qué? Yo le contesto, no quiero irme de este país, él responde: lo que pasa es que al estar acá, uno se da cuenta de que podría vivir en cualquier parte. Me late muy fuerte el corazón; ¿y si aceptara de una vez por todas mi condición nómade? Pienso: es cierto, se puede vivir en cualquier parte, debiera comenzar a hacerlo. <br /><br />(Me pregunto: ¿qué hago escribiendo aquí? Pienso: de alguna manera debía recobrar un espacio de tranquilidad).<br /><br />Con mi hermana conversamos anoche, mientras yo manejaba mi auto. Las dos solas. Le hablé de mí. Las calles enfilaban bajo las luces eléctricas, muy amarillas; ella tenía calor, yo sentía frío. Pienso: somos tan distintas. Le dije algunas cosas de mí que ella preguntaba. Mi hermana es una novia, le miraba a veces el perfil, es tan hermosa: sus mejillas suaves, sus ojos verdes. Pienso: yo tengo los ojos oscuros y la mirada brava. Pienso: debiera ser más dulce, ¿cómo ella? No. Como yo misma si fuera dulce. <br /><br />Héctor también es mi hermano, yo lo elegí. Hoy estaré con él, como siempre quisiera estar. Recuerdo su casa en México, los espacios amplios, su terraza, la calle, la luz por la noche. El día que llegamos, cuando abrí el bolso en el dormitorio de Yaxkin y vi mi libro ahí, en otro país. "La perla suelta" en México. Pienso: ese día tuve que tomar una decisión. Pienso: fue la correcta.<br /><br />Hoy por la mañana me corté la chasquilla. No sé si estaba preparada. No me he tocado un solo mechón del cabello hace meses. Crece tremendo, como no crecía hace años. Pienso: correcciones de la cabeza, ediciones. Pienso: estoy escribiendo por escribir. Pienso: así lo hago desde hace muchos años.<br /><br />Regresé de un largo viaje, publiqué mi tercer libro. Mi hermana se casa, Héctor hoy recibe su premio, por la mañana me corté la chasquilla. Puras coincidencias.la perlahttp://www.blogger.com/profile/06555457281088576895noreply@blogger.com1